Lo que te está impidiendo conseguir tus objetivos no es falta de conocimiento.
, no te hace falta ninguna receta secreta ni ninguna fórmula ni ejercicio mágico.
Tampoco vas a encontrar la respuesta en Instagram ni en TikTok.
Lo que nos hace falta en la mayoría de casos es ser constantes con las prácticas y disciplinas diarias que nos acercan al resultado que queremos.
Por ejemplo, si quisieras ahorrar para comprar una casa, no probarías ahorrar un poco hoy, comprar una lotería mañana, vender un órgano la semana siguiente porque no te tocó la lotería... Probablemente empezarías a ahorrar una cantidad que te puedas permitir semana a semana, mes a mes.
Entonces, ¿por qué harías lo mismo con tu entrenamiento y alimentación?
Tenemos demasiada información a nuestro alcance, queremos probarlo todo y no le damos suficiente tiempo a las cosas básicas que traen la mayor parte de los resultados. Pasamos de una rutina a otra, o de una dieta a otra, antes de que se llegue a formar un hábito que permita que esos resultados sean duraderos.
Como coach, el valor que aporto a mis clientes no es conocimiento de algún arte secreto para verse y sentirse bien, sin preocuparse de lesiones o dolor articular.
El principal beneficio de tener un coach es el seguimiento y acompañamiento continuo
a lo largo del proceso.
Si eres constante, los resultados llegan para quedarse.
Por cierto, hace un par de años escribí este artículo sobre cómo ser más constante en 6 simples pasos.
Si sientes que necesitas ser más constante con tu entrenamiento o alimentación, te recomiendo que lo leas.
En el artículo encontrarás:
- Cómo pasar de objetivos basados en resultados a objetivos basados en procesos
- Cómo crear tu propia definición de "constancia"
- La estrategia para seguir siendo constante aún cuando tienes mucho estrés y poco tiempo
- Y cómo ponerlo todo en práctica