El email de hoy es corto y tiene una pregunta para ti al final.
Esta semana compartí un post en Instagram explicando qué significa ‘libertad física’ y cómo mi misión actual como coach es ayudar a personas cuyos trabajos, vida familiar o lesiones han afectado su libertad física, a recuperarla y mantenerla a largo plazo.
El
mensaje importante de este post es que cada persona tiene su propia definición de lo que significa la libertad física.
Para algunos, puede significar tener una apariencia física con la
que se sientan más cómodos y seguros de sí mismos, sin preocuparse de los comentarios de los demás.
Para otros, puede estar relacionado más a actividades y deporte.
Para mi, significa poder lanzar pesas por el aire y atraparlas por encima de mi cabeza sin preocuparme por mi lesión lumbar. Para uno de mis clientes, significa poder correr con su novia y su perro sin
preocuparse por que le duelan las rodillas. Para otra cliente, significa viajar y dar 20k pasos en un día y no sentir dolor en la cadera que le operaron (más sobre esto abajo).
Si has
tenido una lesión, una cirugía o algún dolor persistente, conoces ese miedo de no saber si podrás volver a ese deporte o actividad que te trae tanta alegría.
Ese miedo, junto con las
ganas de no perder mi libertad física, fue que me motivó a aprender y desarrollarme como entrenador personal.
Ahora, mi parte favorita de trabajar con clientes de coaching es los
mensajes en los que me cuentan cómo han recuperado esa confianza y esa sensación de libertad en su día a día.
Te dejo uno que recibí hace poco y me hizo el día: